Playa de Santa Marianita
Playa de Santa Marianita
Es una joya escondida en la costa de Manabí, a pocos minutos de Manta. Con más de 4 km de arena suave y aguas cálidas, ofrece un paisaje tranquilo que combina el azul intenso del mar, la brisa constante y la sencillez de un auténtico pueblo de pescadores. A diferencia de las playas saturadas, aquí encontrarás un entorno natural que invita a descansar, caminar al atardecer y disfrutar de la vida al ritmo del océano.
Uno de sus mayores encantos es la paz y seguridad que transmite. Santa Marianita es una zona muy tranquila, donde tanto locales como visitantes disfrutan sin preocupaciones. La comunidad es hospitalaria y amable, y la playa mantiene un ambiente relajado, ideal para explorar con confianza, dejar tus pertenencias al pie de la orilla o simplemente desconectarte en un espacio libre de estrés.
Kitesurf
Conocida como la capital del kitesurf en Ecuador, Santa Marianita es ideal para quienes buscan emoción sobre las olas. Sus vientos constantes, presentes entre mayo y enero, atraen a deportistas de todo el mundo. Tanto principiantes como expertos encuentran aquí el escenario perfecto: escuelas certificadas, alquiler de equipos y la oportunidad de vivir la adrenalina de deslizarse frente a un horizonte infinito.
Avistamiento de Ballenas
Entre junio y octubre, las aguas de Santa Marianita se convierten en el escenario de un espectáculo inolvidable: la llegada de las ballenas jorobadas. Saltos majestuosos, aletas que golpean el mar y la emoción de verlas tan cerca hacen de esta experiencia un recuerdo único de tu estadía.
Vive la magia de la naturaleza en su máxima expresión y déjate sorprender por la fuerza y belleza de estos gigantes del océano.
Playa San Lorenzo – Sendero El Faro
A 20 minutos de Santa Marianita se encuentra este sendero de 1 km que atraviesa el bosque seco y conduce a la imponente Playa San Lorenzo. El recorrido ofrece miradores naturales con vistas inolvidables de los acantilados y del mar, donde entre junio y octubre es posible observar ballenas jorobadas.
Esta playa es además un santuario natural: cada año se registran alrededor de 250 nidos de tortugas marinas. Aunque no es recomendable nadar por sus fuertes corrientes, el entorno intacto, las aves marinas y la riqueza del paisaje hacen de este paseo una experiencia única.
Sendero del "pasaje del mono"
Vive una experiencia única recorriendo un sendero de 1,5 km que atraviesa el corazón del bosque húmedo. Durante la caminata podrás descubrir la belleza de los árboles nativos, la riqueza de la fauna local y, con suerte, observar de cerca a los imponentes monos aulladores.
Acompañados siempre por un guía especializado, los visitantes se sumergen en un entorno natural lleno de vida, aprendizaje y aventura. Es una actividad ideal para quienes disfrutan de la naturaleza y buscan conectar con la magia del bosque.